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Filosofía para jóvenes y mayores

Una carta más de Platón a los Sofistas



Señores “políticos” ¿qué necesita saber una persona cualquiera para gobernar? Según vosotros tan solo necesita un aprendizaje de la oratoria con el objetivo de persuadir a la plebe mediante la palabra, aunque no se diga la verdad ya que esta es relativa.


Bajo mi punto de vista, llegar a ser gobernante requiere una educación impartida desde el nacimiento y que tiene como finalidad gobernar con justicia y sin intereses personales.


Esta educación requiere mucho esfuerzo y dedicación porque se han de pasar una serie de fases que no todos serán capaces de superar, ya que solo las personas de las mejores naturalezas llegaran a gobernar.


Para gobernar con justicia, el gobernante ha de conocer el significado de esta palabra, y en el caso que la conozca actuará justamente porque una persona que conoce la justicia necesariamente ha de gobernar justamente.


Pero para llegar a conocer el significado de esta idea el gobernante tiene que haber superado las etapas de imaginación, creencia y pensamiento, y poder utilizar el método dialéctico para llegar a conocer el significado de todas las ideas hasta llegar a la idea de bien. En el momento en el que se conozca esta idea podremos decir que esta persona está preparada para tomar el mando del gobierno.


Este gobierno llegará a ser justo cuando los comerciantes y los guardianes cumplan su función y se sometan a la voluntad del gobernante, en este caso diremos que el pueblo esta en armonía y solo en este caso se dará la justicia.


Llevo toda mi vida conviviendo con los enfrentamientos y las luchas para tomar el poder, he visto pasar gobernantes infames que condenaron a muerte a personas inocentes. Todas estas cosas he visto y todas tienen el mismo objetivo, el beneficio personal en detrimento del pueblo por eso he intentado formular un gobierno que remedie todo este caos.


Espero que reflexionen sobre esto y que no me maten por ser una de las pocas personas que se dan cuenta de lo que esta pasando



Ángel Enrique

1 comentario

Anónimo -

Las personas son ontológicamente egoístas. Está en nuestra naturaleza y no es necesariamente malo. Simplemente "es"

Ahora bien ¿por qué el gobernante, siendo humano (y no "ángel") va a ser menos egoísta y menos movido por el poder, el sexo y la vanidad que el resto de los mortales?